El BOI de Tailandia fomenta la inversión en la industria ligera. Incluye actividades de fabricación de productos textiles, prendas de vestir, bolsos, zapatos y ropa. También se extiende a muebles, piezas, gemas y joyas. Así como el diseño creativo de productos y la fabricación de dispositivos o piezas médicas.
Tailandia es uno de los pocos países del mundo que puede suministrar la cadena completa de la industria textil, desde las fases iniciales, pasando por las intermedias, hasta las posteriores, desde la producción petroquímica y de fibras naturales, hasta los tejidos y textiles, hasta el diseño, la producción y la venta de prendas de vestir, textiles para el hogar y textiles técnicos.
Fabricación de dispositivos o componentes médicos: Muchas de las principales empresas de dispositivos médicos invierten en Tailandia por el gran potencial de crecimiento del mercado, la abundancia de materias primas (especialmente caucho natural, del que Tailandia es el mayor productor mundial), la mano de obra cualificada y asequible, las excelentes infraestructuras, la avanzada tecnología de producción y las estrictas normas de control de calidad. Además, el gobierno ofrece atractivos incentivos a la inversión en el sector de los dispositivos médicos.
Gemas y joyas: Gracias a su reputación secular de magnífica artesanía y a su sólida base manufacturera, Tailandia se ha convertido en uno de los principales exportadores mundiales de gemas y joyas. La producción de gemas y joyas desempeña un papel crucial en la economía del Reino a través de la creación de puestos de trabajo y el desarrollo de industrias afines, como el tallado de gemas, el equipo de tallado de gemas, el diseño de joyas, la minería y el envasado. Hay unas 700 fábricas registradas en el Departamento de Obras Industriales, el 80% de las cuales son pequeñas y medianas empresas.
La creación de la Comunidad Económica Asiática (AEC) en 2015 ha convertido a la ASEAN en un mercado único que facilita la libre circulación de mercancías y de servicios, la inversión, el capital y la mano de obra cualificada en la región. Muchas empresas de talla mundial han trasladado sus operaciones a Tailandia para reducir los costes de producción y beneficiarse de la ubicación estratégica de Tailandia, así como de los incentivos del BOI de Tailandia.
El valor añadido del proyecto no debe ser inferior al 20% de los ingresos, excepto en el caso de los proyectos de agricultura y productos agrícolas, productos y piezas electrónicas y centros de bobinado, todos los cuales deben tener un valor añadido de al menos el 10% de los ingresos.